domingo, 13 de abril de 2008

¿Semana Santa Folclore?


La comunidad cofrade presente en la red a través de páginas y blogs tiene sentido sobre la base de la educacion religiosa y el testimonio de vida que se puede aportar a quien visita los lugares, es por eso que, a veces, navegando te encuentras con reflexiones tan interesantes como la que he encontrado en "reflexionesdeiacobus" sobre la acusación a la que tantas veces tenemos que hacer frente los cofrades de ser tachados permanentemente de folclóricos sin sentido, nada más lejos de la realidad. La reflexión es la siguiente:

"Dicen los que no entienden la Semana Santa, y con ello intentan descalificarla, que la Semana Santa o más bien las procesiones que durante ese tiempo se desarrollan en las distintas provincias españolas, son Folclore y no sentimiento religioso o muestra de Fe. Parte de razón no les falta, pues si nos atenemos a la definición de Folclore como cuerpo de expresión de una cultura, compuesto por música, historia oral, costumbres y demás, común a una población concreta, incluyendo las tradiciones de dicha cultura, subcultura o grupo , lo que realizamos los cofrades en nuestras cofradías durante estas fechas no deja de ser eso, una expresión de cultura cristiana expresada a través de una costumbre, en la que se incorporan elementos tales como las imágenes de la pasión y muerte de Cristo y la música que las acompaña. Además cumple con las características que tiene el folclore, a saber:
Es anónimo, ya que es difícil identificar al autor o autores de esta manifestación, aún que haya estudiosos que intenten poner creadores a tal manifestación.
Es espontáneo, puesto que la transmisión se da de manera natural entre las generaciones.
Es antiguo, por que registra hechos del pasado y no se puede precisar la fecha de origen, aún que esto es algo que poco a poco se va acotando, ya que si bien es cierto que no se puede precisar la fecha exacta de la aparición de esta manifestación popular si se puede afirmar que fue el Concilio de Trento el mayor impulsor de esta manifestación religiosa.
Por lo anteriormente expuesto podríamos decir que la Semana Santa o mejor dicho las procesiones de Semana Santa son Folclore, pero folclore entendido desde el punto de vista religioso, ya que sin esta creencia en Cristo y en Su Madre, la Virgen, nada de esto tendría sentido. Claro está que las personas que piensan esto no son capaces de ver mas allá de la manifestación pública que es una procesión cuando está en la calle. No conciben, porque no la han vivido, lo que es una Cofradía, ya sea penitencial o de gloria. No son capaces de ver mas allá de lo que ocurre en esa Semana Mayor. Solo ven la puesta en la calle, no ven todo lo que hay anterior y posteriormente a esa Semana.
Para cualquier persona no involucrada en la Semana Santa y para muchos de los involucrados en ella, la Cofradía es eso, una procesión, una expresión popular en la que se recuerda la Pasión y muerte de Cristo, pero para los que realmente se involucran en la Semana Santa, para aquellos que viven día a día las Cofradías la Semana Santa no es la procesión, es una forma de vivir la Fe en Cristo de manera algo distinta a la que estamos acostumbrados a ver, y claro, cuando nos tachan de folclóricos nos sentimos ofendidos. Pero no tenemos que sentirnos ofendidos, más bien tenemos que demostrarles que si bien la Semana Santa para ellos es Folclore, tienen que saber distinguir que nada de eso tendría sentido sin una creencia religiosa y que es todo lo que ocurre en esa semana alrededor de las procesiones lo que le da el aire de folclore, no la propia procesión, es decir que folclore son los platos típicos que se degustan en esa época del año, folclore son las bebidas típicas que se toman en determinadas ciudades, o la forma en la que se cargan las imágenes o determinadas costumbres que se tienen en esa época.".

Tomado de: http://reflexionesdeiacobus.blogspot.com/2007/05/semana-santa-folclore.html

Gracias, hermano, por esta magnífica reflexión.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sí señor, muy bien argumentado. Además conviene que más de uno de nuestro pueblo, para no irnos muy lejos, lo lea y lo reflexione. Pues ni un desfile de estandartes es una ofrenda fallera ni ir por las andas por el pueblo es hacer concurso de fuerza.